De pronto hay un bombardeo de gente conviviendo, comprometiéndose, independizándose, teniendo bebés, formando familia, y comenzando vidas llenas de decisiones importantes.
Mientras tanto yo, tomo difíciles decisiones como si ponerle mantequilla o dulce de membrillo al pan o si el clima está para ir con falda a práctica profesional. Definitivamente, me quedo con el membrillo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.